domingo, 12 de septiembre de 2010

El espejo. Una espada de doble filo

Hace tiempo escribí "La profundidad puede encontrarse en todas partes" como una revelación que dio vida a este Blog.

Sin embargo, ahora despues de varios meses de rumiar esta y otras ideas me parece que no es que la "profundidad" exista en todos lados como en un principio inferí, sino que mas bien es algo que se descubre en el interior, algo que descubrí sobre mí en ese momento, mas no fui consciente de ello y para explicarlo o concebirlo lo aleje al enviarlo a mi entorno y comenzar a verlo en "todas partes".

Así, realmente lo que sucedió es que descubrí la profundidad en mi, fue entonces que mi entorno sirvió de espejo para mi descubrimiento interno, lo veía porque lo poseía. Un conocimiento que ya tenia sobre otros aspectos pero que nunca relacione con aquella frase que engendré en aquel momento.

Ahora reformaré aquella frase: no es que la profundidad se hallé en todas partes, sino que como muchas otras cosas que vemos, existen primero dentro de nosotros, y es así como tenemos acceso a ellas. Alegremonos entonces si somos capaces de ver belleza en la naturaleza, o en otros lados, pues esa belleza existe dentro de nosotros.

Pero cuidado, que no solo lo deseable esta ahi, recordemos que también vemos maldad, vileza, fealdad, etc. Logramos concebirlo porque también existe dentro de lo que forma nuestro ser. ¿Cuales son las cosas que con mayor frecuencia vemos?





Esto me recuerda la frase "Quien se queja no ha madurado", y creo que comienzo a descifrar su significado. Pues quien se queja esta viendo lo negativo en alguien mas, sin darse cuenta de que lo que ve es un reflejo de si mismo.

Alguien cuya consciencia esta mas despierta entenderá que eso que le incomoda es algo que esta dentro de si mismo, y preferirá reconciliarse con sigo mismo antes de ir a tratar de cambiar lo que esta fuera de su alcance, alterar mundos que no le pertenecen.

En este punto me doy cuenta de la enorme sabiduría que puede encerrar la tradición popular por medio de ciertos dichos o frases, refiriendome al tan socorrido "Soy espejo me reflejo". Me doy cuenta de que desde entonces se me presentaba la oportunidad de entender esto, pero me tomo varios años capturar su significado, y aquí esta finalmente, me serviré de ella para descubrirme en nuevas, y divertidas formas.

Ya para terminar, y siguiendo la linea de todo el pensamiento antes expuesto, alegremente miro que soy sabio, cuando menos hasta cierto punto, pues veo sabiduría en la incorporea "tradición popular".

Para mi siguiente entrada, ¿será que lo que yo defino con un adjetivo será lo mismo en mi mente que en la de alguien mas? Para mi ser sabio ¿sera lo mismo que para ti?

lunes, 6 de septiembre de 2010

Dualidad y Unicidad

La dualidad

Es asi como denominamos a nuestra incapacidad para aceptar que lo que nos parecen opuestos, realmente es solo parte de un todo, ciclico e interminable, donde lo bueno se compone de maldad, lo obscuro de luz y en donde la ausencia de vida hace posible el milagro de nuestra existencia.

Pero, dicha incapacidad ¿dondé tiene su origen? ¿será acaso en la ignorancia? realmente podemos ignorar la obviedad, o ¿será mas bien por una falta de humildad? Pues dichos opuestos existen en nosotros mismos, así en el que se dice ser justo existe también la injusticia, en el avaro existe la generosidad y en el feliz también hay tristeza.

Esa aparente separación de las cosas, en dos extremos irreconciliables, es un mero sofisma que se crea en nuestra mente, probablemente para lograr entender nuestras situaciones mediante la lógica o porque nuestro cerebro esta dividido y así trabaja mejor.

Así podemos hablar de niveles de un todo, si hablaramos de colores el negro seria un extremo, en la escala de un color cuyo nombre no ha sido pronunciado aun, y el  blanco seria simplemente el otro extremo.







Este distanciamiento es el que nos confunde y nos hace pensar en términos separatistas, cuando en realidad, si lo vemos claramente, puede ser que nuestra mente nos posicione en una fracción del todo de las cosas.

Se suele mencionar que cada cabeza es un mundo, pues yo digo que cada cosa es un mundo, y cuando nos adentramos en ellas mediante nuestra mente, que es el canal que nos da acceso a dichos terrenos, somos como exploradores. Sin embargo,  hasta ahora hemos sido como pensadores del siglo XVII, pues creemos que los mundos que vemos son planos  y que todo lo relativo a ellos gira en torno a esa parte que alcanzamos a ver.

Seamos como Galileo, demonos cuenta de que cada mundo al que accesamos es mayor a lo que en un principio percibimos, que un extremo no lo es todo, mas bien es una porción que da forma a esa esfera que gira en torno a algo aun superior. Reconciliemonos con eso que llamamos opuestos pues son mas iguales de lo que hasta ahora habiamos pensado.